El servicio de Oncología del Hospital General Universitario de Valencia ha obtenido una certificación excelente, 91 puntos sobre 100, por The Quality Oncology Practice Iniciative, de la Sociedad Americana de Oncología (ASCO, American Society of Clinical Oncology). Esta valoración mide la calidad del proceso asistencial de los pacientes oncológicos en un hospital siguiendo unos criterios, indicadores y estándares consensuados por expertos norteamericanos de reconocido prestigio internacional.
Avalada por la QOPI (The Quality Oncology Practice Iniciative), grupo de trabajo en calidad de la Sociedad Americana de Oncología (ASCO) y a través de un convenio de colaboración con la Fundación ECO (Excelencia en la Calidad Oncológica), un grupo de hospitales españoles ha podido acceder a la realización de esta evaluación que permite detectar sus puntos débiles y sus fortalezas y compararse con los mejores hospitales americanos en cáncer, los cuales ofrecen la mejor calidad asistencial mundial en esta enfermedad.
Esta iniciativa permite "reducir la variabilidad clínica no justificada, el aumento de la satisfacción de los pacientes y profesionales y un cambio de cultura organizacional hacia el fomento de la mejora continua", explica el jefe del servicio de Oncología del Hospital General y director de programas científicos de la Fundación ECO, Carlos Camps.
The Quality Oncology Practice Iniciative, QOPI, es una iniciativa que surge en 2002 en el seno del instituto de calidad del la Sociedad Americana de Oncología para promover la mejora de la calidad en la atención del cáncer.
La implementación de estos criterios supone una herramienta de referencia entre los servicios de Oncología para la autoevaluación de la calidad y en una segunda fase se podrá solicitar la certificación de la misma de los centros asistenciales de esta especialidad, proceso en el que tendrá parte muy importante la Fundación ECO. Para Ana Blasco, oncóloga del Hospital General, "es muy importante disponer de herramientas de medición que te permitan detectar tus fortalezas y también tus debilidades para poder mejorarlas y que además te permitan compararte con otros centros".
"Nuestra puntuación, del 91 sobre 100, indica que vamos por el buen camino y además nos posibilita mejorar aún más al detectar algunas áreas de mejora como por ejemplo el índice de tabaquismo documentado entre nuestros pacientes en el último año", señala la doctora Blasco.
La informatización de todos los datos de los pacientes de nuestro hospital gracias a la Historia Clínica Electrónica es un elemento fundamental que facilita y asegura la posibilidad de controlar la recogida de la información necesaria para poder realizar esta autoevaluación de los profesionales en el Hospital General. "Esta actividad de autoevaluación está dirigida especialmente para que nuestros enfermos tengan la seguridad de que ponen sus vidas en manos de los mejores profesionales, que trabajan en una institución que se preocupa de lograr la mayor calidad posible en la organización y planificación de los procesos oncológicos", añade el doctor Camps.
Esta certificación mide y analiza la calidad de los medios (estructura, equipamiento, instalaciones, etc.) de los métodos (evaluación del proceso, actuación de los profesionales) y de los logros asistenciales (evaluación de los resultados, según el nivel de salud de los pacientes, según sus necesidades y expectativas).
La medición dentro del programa de certificación QOPI es continua y se realiza en dos oleadas, primavera y otoño. Está orientada principalmente a medir resultados en salud, es decir, los beneficios que se derivan en la población española, más en concreto la valenciana, del trabajo que realizan con ellos los profesionales de la salud, en este caso los oncólogos médicos del Hospital General de Valencia.